Morelia, Michoacán; a 28 de mayo de 2025.- Tras las manifestaciones y posicionamientos de periodistas, reporteros y fotoperiodistas que se dieron cita en el recinto legislativo para evidenciar que la propuesta inicial atentaba contra la libertad de expresión, la 76 Legislatura del Congreso de Michoacán aprobó una reforma que tipifica la apología del delito, pero con modificaciones que garantizan el ejercicio libre del periodismo y la labor informativa.
Durante la sesión ordinaria, y ante la presión social ejercida por los gremios de comunicación, se incorporaron ajustes clave a la propuesta impulsada por la Comisión de Justicia. Las y los legisladores destacaron que combatir la violencia y las actividades ilícitas no puede ir en detrimento del derecho constitucional a informar y opinar libremente.
Con 24 votos a favor, 9 en contra y dos abstenciones, el Pleno aprobó adicionar la fracción IX al artículo 24, así como el artículo 163 quinquies y el Capítulo VII al Título Cuarto del Libro Segundo del Código Penal para el Estado de Michoacán, para sancionar a quien promueva o glorifique públicamente a grupos delictivos o personas relacionadas con ellos mediante mantas, calcomanías, imágenes u otros medios.
Sin embargo, y como resultado de la presión ejercida por el gremio periodístico, se incluyó el artículo 163 sexsies, a propuesta de la diputada Sandra María Arreola Ruíz, el cual exceptúa expresamente de responsabilidad penal a quienes, en el ejercicio legítimo de la labor periodística o comunicativa, informen sobre hechos delictivos o relacionados con la violencia.
También se estableció que serán considerados autores o partícipes del delito aquellos que promuevan o difundan ideas que inciten a la criminalidad, siempre que no se trate de actividades periodísticas legítimas.
El nuevo Capítulo VII, denominado “Provocación a cometer un delito y apología de este o de algún vicio”, contempla una sanción de tres a seis meses de prisión y una multa de entre ochenta y ciento cincuenta Unidades de Medida y Actualización, para quien incite públicamente a cometer delitos, consumir sustancias ilícitas o haga apología de estas conductas, si el delito no se concreta.
El dictamen destaca que la violencia ha ido en aumento en el país, en parte debido al entorno social y la desconfianza hacia las autoridades. No obstante, las y los diputados subrayaron que esta reforma no vulnera la libertad de expresión, ya que el periodismo crítico y responsable podrá seguir ejerciéndose, siempre que no promueva ni glorifique la criminalidad.
