Mientras se dedica a realizar proselitismo por la revocación de mandato. Que alguien le explique que su obligación es velar por esa pacificación que le está pidiendo a su propio partido, ese que de paso, también está más preocupado por la revocación. El permiso para que haya peleas de gallos lo otorga el alcalde. Dudo mucho que siendo un lugar tan público, al que la gente se refiere como “el lugar dónde se hacen las peleas de gallos” sea tan clandestino.